Es importante saber que los aceites esenciales son mucho más que meros perfumes o aromatizantes y porque sean naturales no implica que su uso sea completamente seguro. Por el contrario: muchos de ellos son bastante tóxicos y pueden ser letales si no se usan de forma correcta.
Consejos de utilización
– Para uso en perfumería, uso cosmético y/o culinario, según la esencia absoluta.
– Se pueden utilizar solas o mezcladas.
Precauciones en el empleo
– Mantener fuera del alcance de los niños.
– Se debe prestar una atención especial a los pacientes que presenten una alergia conocida, pues en los Absolutos puede estar presente cierta cantidad de moléculas potencialmente alergénicas.
En caso de ingestión accidental de una cantidad importante de absoluto, contacte el centro de toxicología más próximo:
INTCF: 915 620 420
Conservación
– Guardar en un recipiente cerrado, protegido del aire, la luz y la humedad.
– Para evitar su oxidación, no calentar a más de 40ºC.
– Algunos aceites esenciales se disuelven mal en alcohol y en aceites vegetales. Se puede formar un depósito al fondo del frasco. Cuando quede poco, añadir un disolvente (alcohol o aceite) con el fin de recuperar la fragancia residual.
– El color y el olor de un aceite esencial pueden variar según la cosecha y el país de origen.
En el caso de ingestión accidental de una cantidad importante de aceite esencial, contacte el centro de toxicología más próximo (915 620 420).